
La inteligencia artificial (IA) en energía solar ya es una realidad. Lejos de ser una tecnología experimental, hoy se utiliza de forma práctica para mejorar la producción, reducir fallos y optimizar la operación de plantas fotovoltaicas, especialmente a escala industrial.
En un sector donde pequeñas mejoras en el rendimiento tienen un impacto directo en la rentabilidad, la combinación de datos operativos e inteligencia artificial se ha convertido en un factor esencial para propietarios y operadores de activos solares.
En este artículo de Bluence explicamos, de forma sencilla, qué aporta la IA a la energía solar, cuáles son sus principales usos y cómo se puede integrar en la operación diaria de una planta.
Las plantas solares actuales son cada vez más grandes, geográficamente dispersas y conectadas a sistemas complejos como el almacenamiento o los mercados eléctricos. Además, cada planta genera millones de datos cada día, que si se interpretan correctamente pueden aportar insights valiosos.
La IA ayuda a gestionar esta complejidad con un enfoque mucho más práctica y en el que hay beneficios concretos para la operación:
Todo esto hace que los operadores pasen de una operación reactiva a una gestión anticipativa, donde se actúa antes de que ocurra un problema.
Lo cierto es que el crecimiento de la energía solar en los últimos años ha sido notable a nivel global. De hecho, según IRENA, la capacidad fotovoltaica mundial superó los 1.865 GW, con un crecimiento récord de 452 GW en 2024.
Además, en zonas como Estados Unidos, la producción solar ha crecido muy rápido, incluso superando a fuentes tradicionales en ciertos mercados.
Estos casos confirman que adoptar tecnologías como la IA es una ventaja competitiva y una necesidad para operar plantas solares a gran escala con eficiencia y rentabilidad.
Por ende, la irrupción de la IA en la industria de la energía solar ya ha dejado entrever cuáles serán las próximas tendencias en energías renovables y en el resto de la industria energética.
La IA analiza continuamente el comportamiento de la planta y ajusta la operativa para que produzca lo máximo posible en cada condición. Para eso, tiene en cuenta factores como la meteorología, el estado de los equipos o las limitaciones de red.
En vez de esperar a que un inversor o un string falle, la IA identifica comportamientos extraños y avisa con antelación. Así, facilita el poder actuar antes, reducir pérdidas de energía y optimizar el mantenimiento.
Las previsiones de producción son básicas para operar plantas solares, especialmente cuando participan en mercados eléctricos o se combinan con baterías. La IA mejora la precisión de estas previsiones, minimizando los errores y las penalizaciones.
Ejemplo: según api4.ai, un sistema de IA podría reconocer que unas nubes sobre un parque solar limita un 20% por hora la producción.
La IA no sustituye a los equipos humanos, sino que les ayuda a priorizar. Por ejemplo, para saber qué incidencias son más importantes, dónde actuar primero o qué decisiones tienen mayor impacto económico.
No obstante, uno de los errores más comunes es pensar que la IA es una capa aislada. En realidad, funciona mejor cuando se integra de forma progresiva en el día a día.
Así que un enfoque habitual para integrar la inteligencia artificial en energía solar podría ser este:
En lo que a nosotros respecta, en Bluence, la IA se integra directamente en plataformas diseñadas para la operación industrial de plantas solares y activos híbridos. El objetivo no es mostrar tecnología compleja, sino hacerla útil y operativa en el día a día.
Por eso, las capacidades más importantes que ofrecemos incluyen:
De este modo, la IA pasa a ser una herramienta de lo más práctica y útil con la que mejorar el rendimiento, abaratar costes y ganar fiabilidad en las plantas fotovoltaicas.
La inteligencia artificial ya es vital para la competitividad en la energía solar. Sus beneficios son claros: más producción, menos incidencias y una operación más eficiente y escalable. Con Bluence, la IA pasa a ser una herramienta práctica y operativa totalmente integrada en el día a día de las plantas solares y en la gestión de activos. ¿Quieres llevar la IA a tus plantas fotovoltaicas? Pide tu demo personalizada en Bluence y descubre cómo.